El presidente electo de Estados Unidos y la ministra principal de Escocia mantuvieron un primer contacto telefónico.
El recientemente electo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantuvo una conversación con la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon. Según un vocero de la Casa Blanca, la llamada se debió al interés de fortalecer la relación entre ambas naciones.
Donald Trump es dueño de dos campos de golf y de un complejo de hoteles en Escocia, por lo que se presume que pretende mantener buenas relaciones debido a sus actividades comerciales y no solo a las políticas.
Sturgeon, defensora a ultranza de la independencia de Escocia, había sido crítica con Trump durante la campaña del magnate, al pedirle que abandonase su «aborrecible retórica». Luego de su triunfo afirmó que esperaba que el Trump presidente fuese distinto al Trump candidato.
Al parecer, Trump procurará tener una buena relación con la líder de la tierra en la que nacieron sus ancestros. Este ha sido, por ahora, el único contacto.
